TRATAMIENTO PSICOLÓGICO PARA LAS FOBIAS

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se estima que alrededor del 20 por ciento de la población global sufre al menos una fobia.

Las fobias específicas más comunes son el miedo a los animales (zoofobia), el miedo a las alturas (acrofobia) y el miedo a las tormentas (astrafobia o brontofobia), el miedo ante la visión de sangre o heridas o ante el hecho de recibir inyecciones.

Las personas que padecen una fobia específica evitan las situaciones u objetos concretos que les provocan miedo y ansiedad llegando incluso a sufrir crisis de ansiedad a consecuencia de ello.

¿Qué son las fobias?

Las fobias son un trastorno de ansiedad que se caracteriza por el miedo anormal y desmedido a enfrentarse a determinados objetos o situaciones.

Las personas afectadas por alguna de ellas tienden a evitar esos objetos o situaciones, o enfrentan las situaciones temidas con un elevado nivel de ansiedad.

Las fobias alteran la vida cotidiana y pueden ser muy paralizantes.

¿Existen diferentes tipos de fobias? ¿Cuáles son las más comunes?

En efecto existen diferentes tipos de fobias, pero podemos clasificarlas en dos tipos fundamentalmente:

Fobia social:

La fobia que más preocupa a las personas que la padecen es la fobia social, se trata de un miedo irracional a afrontar situaciones que impliquen el contacto social, como hablar en público o acudir a reuniones sociales.

El temor básico de esta fobia es el miedo a la opinión que pueden tener los demás sobre uno mismo, pensando cosas como 'voy a hacer el ridículo', '¿qué pensarán de mí?'.

También puede aparecer ante las siguientes situaciones:

• Angustia por sentirse avergonzado o humillado.
• Temor intenso de interactuar o hablar con extraños.
• Temor a situaciones donde podrías ser juzgado.
• Temor a que los demás noten que estás ansioso.
• Temor a tener síntomas físicos que puedan causarte incomodidad, como sonrojarse, sudar, temblar o que te tiemble la voz.
• Dejar de hablar con ciertas personas por miedo a sentirte avergonzado.
• Evitar situaciones donde puedas ser el centro de atención.

Las personas que sufren fobia social, se caracterizan por padecer un alto grado de ansiedad que si no se trata adecuadamente puede derivar en el trastorno de ansiedad social o en el trastorno de ansiedad generalizada, que suelen desencadenar ataques de pánico cuando las personas que los padecen se encuentran expuestos a es nivel de ansiedad social tan elevado.

Fobias simples o fobias específicas:

El otro tipo de fobias son las llamadas fobias simples o fobias específicas, que son miedos exagerados a situaciones concretas u objetos.

Los objetos más comunes que provocan fobias son: los payasos, agujas, sangre, vómito, el agua o el mar, y algunos animales como: fobia a las cucarachas, perros, serpientes, pájaros, insectos, arañas o tiburones.

Y en cuanto a situaciones que suelen provocar fobias se dan en general: miedo a los sitios cerrados, o abiertos, a volar y a las alturas, a la oscuridad, a la gente, a salir de casa, a conducir, a sudar, a los pobres, al mar abierto, al fondo del mar.

Las personas que padecen alguna de estas fobias, normalmente responden a ellas evitando enfrentarse a las situaciones que les producen tanta ansiedad y miedo.

¿En qué se caracterizan las fobias?

Todas las fobias tienen algunas características comunes, la principal es el deseo incontrolable de huir de la situación temida.

Las personas con fobias suelen ser conscientes de que sus temores no tienen fundamento, pero por lo general huyen para evitar el objeto de su temor.

Otra característica es la preocupación incontrolable y completa acerca del temor y del objeto temido.

En todas las fobias aparecen algunos de los siguientes síntomas físicos que guardan relación con la ansiedad y el miedo. Por ejemplo:

• Aceleración del ritmo cardíaco y palpitaciones.
• Sudoración.
• Sensaciones de mareo.
• Náuseas o molestias abdominales.
• Visión borrosa.
• Tensión muscular.
• Sequedad de boca.