12 consejos para manejar los conflictos familiares en Navidad
Se acercan unas señaladas fechas dónde se dan situaciones en las que reencontrarse con la familia, lo cual normalmente es un momento de alegría y dónde se espera que haya buen clima entre todos los asistentes, pero no siempre ésto es así, y en ocasiones hay ciertos conflictos familiares en Navidad.
Enlace al audio del programa al final del artículo, ir al audio.
Tipos de conflictos familiares en Navidad
Existen tres tipos de situaciones que pueden ser especialmente conflictivas:
- Reencuentros entre familiares con conflictos anteriores: Conflictos que no han sido resueltos previamente y también un contacto familiar superior al habitual.
- Conflictos de costumbres con la familia política, y en ocasiones también puede ser un motivo de conflicto la asunción de nuevos miembros en la familia (una nueva pareja…).
- Temas tabúes y temas conflictivos: Como pueden ser ciertos secretos importantes familiares, como faltas graves de respeto, o incluso abusos, pérdidas de las que no se habla (defunciones), situaciones de conflicto interfamiliares (entre los miembros de un subgrupo familiar) que afectan a todos, separaciones o divorcios, etc…
Hay que asumir que es muy difícil que todo el mundo nos caiga bien, y que no siempre van a salir la cosas como esperamos, sobre todo si ha habido conflictos en otras reuniones y que entonces puede aflorar esos conflictos familiares en Navidad.
No debemos olvidar que en un confícto familiar, nadie gana!
Nuestros consejos
- Resolver los problemas que haya antes de juntarse. Ésto quiere decir que tenemos que hablar previo al evento!. Tenemos que desarrollar nuestras Habilidades Sociales.
- Entender que solo puedes actuar en lo que depende de ti, no en cambiar el pensamiento o la forma de actuar de los otros, lo que quiere decir que el cambio comienza en uno mismo.
- Organizar las tareas comunes, es decir, que cada uno tenga su papel y funciones bien definidas, para que todo el mundo sepa a que atenerse.
- Paciencia, sobre todo si se convive en el mismo espacio físico (la casa de los padres), ya que cada persona tenemos nuestro ritmo. Aunque hacer eso no quiere decir que tengamos que resignarnos ante una falta de respeto en la convivencia.
- Realizar un esfuerzo por adaptarse a los demás, cada uno debe tratar de poner de su parte, ya que podemos entender que se trata de una situación circunstancial, y que pasados éstos días, todo vuelve a la normalidad.
- Buscar soluciones a medias, es decir que es mejor que haya dos personas medio fastidiadas a que estemos uno mal y el otro bien, ya que no debemos olvidar, que nadie gana en un conflicto.
- No intentar proteger a quién no cumple lo acordado por no generar conflicto.
- No sacar temas que generen controversia y menos cuando hay alcohol de por medio, y/o bien buscar una persona que actúe como moderador firme y que medie en estas situaciones tan delicadas.
- Mantener una actitud positiva siempre ayuda a generar mejor clima.
- Fijarme en qué aspectos positivos que tiene la persona con quién hay conflicto o cuáles puedo descubrir. Esto provoca que pueda ver a la persona de una forma un poco más relajada, y me va a permitir estar menos “atento” a lo que considero sus fallos.
- Cada uno podría actuar como si se partiese de cero, dar una nueva oportunidad a las personas, y confiar en que en ésta ocasión puede haber cosas distintas.
- Y por último tener en cuenta que sí yo voy a provocar conflictos familiares en Navidad o realmente no deseo estar presente es esa situación, quizá no se tan mala idea no asistir, piensa que ya habrá momentos mejores en los que disfrutar de los tuyos.
Espero que éstos consejos os ayuden en éstos días a que haya menos tensos y desagradables conflictos familiares en Navidad.
Escucha el audio del programa a partir del minuto 29.30´ pinchando aquí!
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