Consecuencias psicológicas de la violencia de género e infancia
Durante el mes de noviembre en el diario Salamanca al Día, podeis leer un monográfico sobre la violencia de género e infancia aprovechando que se acerca el 25-N, día internacional contra la violencia de género, donde he tenido la ocasión de sumarme al reportaje y apotar mi colaboración hablando sobre los efectos psicológicos que tiene la violencia de género sobre los niños y niñas que son víctimas directas e indirectas.
Podeis linkear en el siguiente enlace y leer la edición digital del periódico. Mi aportación aparece en la página 6 aunque por supuesto, os recomiendo que leais tódo el monográfico ya que es realmente muy interesante.
A continuación pongo la transcripción de mi entrevista sobre la violencia de género e infancia, a cargo de la periodista Isabel Rodriguez.
Entrevista sobre violencia de genero e infancia
Vivir en un ambiente conflictivo, de abuso de poder, y ser testigos de actos violentos en el entorno familiar convierte también a los menores, hijos e hijas, en víctimas de la violencia de género. Desde 2015 la Ley orgánica de Violencia de Género reconoce como víctimas a los menores hijos de mujeres víctimas de violencia.
Desde 2010 han muerto 28 menores a manos de las parejas o ex parejas de víctimas de violencia de género.
¿Cómo afecta la violencia familiar a los hijos?
“El trauma deja secuelas y cicatrices con las que la mayoría de las veces se tiene que aprender a convivir”, explica el psicólogo Javier Barreiro. “Los traumas tienen una presencia en sus juegos, sus miedos, sus sueños y sus sentimientos y emociones y sobre sus conductas.
Estas señales son indicadores de una herida psicológica profunda que no se ve a simple vista.
Las experiencias por las que pasan los niños y niñas víctimas de la violencia de género en la pareja son muy graves y las consecuencias son múltiples e incluyen daños que pueden perdurar en el tiempo hasta la edad adulta”.
Una situación de violencia que “no siempre es procesada correctamente por los menores”, añade Barreiro, porque “los menores son muy buenos observadores pero no necesariamente buenos intérpretes”. “De algún modo buscan darle sentido a su realidad, lo que puede llevarles a autoinculpaciones, a culpar a la madre y otra serie de explicaciones incorrectas o parciales”.
Los menores son buenos observadores pero no buenos interpretes
El trauma genera “una sensación profunda de inseguridad”. Los menores víctimas de violencia de género en la pareja, “sienten que sus vidas tienen partes que quedan fuera del propio control, impredecibles, que a su vez afectan al resto de espacios vitales.
No pueden establecer rutinas, no saben cómo será el día, ni si terminará con un nuevo episodio violento. La sensación es de una pérdida de control total”.
Las consecuencias de la violencia de género en menores pueden ser directas (experimentan el mismo tipo de actos violentos que los que experimenta la madre) o indirectas (cuando la agresión ocurre en su presencia o no pueden tomar distancia de sus progenitores porque las secuelas en la madre son evidentes).
Culpa, impotencia, vergüenza, agresividad son solo algunas de las secuelas psicológicas.
Impacto de la violencia
“La exposición a la violencia de género origina efectos negativos en la infancia, independientemente de la edad”, subraya el psicólogo Barreiro, “que van desde problemas físicos como retraso en el crecimiento, alteraciones en el sueño y alimentación, retraso en habilidades motoras…; alteraciones emocionales como ansiedad, ira, depresión, baja autoestima, trastorno de estrés postraumático…; alteraciones cognitivas como retraso en el lenguaje, bajo rendimiento escolar…; alteraciones de conducta como déficits en habilidades sociales, agresividad, déficit de atención e hiperactividad, episodios delictivos, hábitos tóxico-dependientes, déficits en el desarrollo de la empatía.
Todos estos efectos se producen con mayor intensidad en aquellos menores que sufren violencia directa y son víctimas de maltrato infantil”.
¡Todos contra la violencia de género!
Agradezco a Salamanca al Día la posibilidad de participar en éste especial y estoy encantado de haber colaborado junto con Fundación Diagrama CyL; Asociación Plaza Mayor; Asociación Adavas; y el Servicio Especial de Atención a la Mujer y al Menor del Ayuntamiento de Salamanca
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